“No se puede seguir a Jesús sin seguir a la Iglesia. Quien cede a la tentación de ir por su cuenta corre el riesgo de no encontrar nunca a Cristo". (Papa Benedicto XVI).
Buscar en este blog
12 febrero 2012
Evangelio de hoy domingo 12 de febrero, donde también celebramos la colecta de Manos Unidas.
Según San Marcos 1,40-45.
Se le acerca un leproso suplicándole y, puesto de rodillas, le dice: «Si quieres, puedes limpiarme.» Enternecido, extendió su mano, le tocó y le dijo: «Quiero; queda limpio.» Y al instante, le desapareció la lepra y quedó limpio. Le despidió al instante prohibiéndole severamente: «Mira, no digas nada a nadie, sino vete, muéstrate al sacerdote y haz por tu purificación la ofrenda que prescribió Moisés para que les sirva de testimonio.» Pero él, así que se fue, se puso a pregonar con entusiasmo y a divulgar la noticia, de modo que ya no podía Jesús presentarse en público en ninguna ciudad, sino que se quedaba a las afueras, en lugares solitarios. Y acudían a él de todas partes.
Reflexión:
Acogiendo y curando al leproso Jesús revela un nuevo rostro de Dios.
Reintegrar a los excluidos en la convivencia fraterna. Jesús no solamente cura, sino que además quiere que la persona curada pueda convivir de nuevo con los demás. Reintegra a la persona en la convivencia. En aquel tiempo, para que un leproso fuera de nuevo acogido en la comunidad, tenía que tener un certificado firmado por un sacerdote. Es como hoy. El enfermo sale del hospital sólo si tiene un certificado médico firmado por un doctor.
El Señor al mostrarse compasivo y misericordioso, nos muestra el camino que debemos seguir. Que no dejemos nunca de ser comprensivo con los demás como EL es con cada uno de nosotros.
El lema de la campaña de Manos Unidas para este año: "La salud, derecho de todos: ¡actúa!"
En esta campaña, se reclama el cumplimiento de uno de los objetivos del milenio, la reducción de las graves enfermedades que azotan a las zonas del mundo más desfavorecidas, ha de ser el resultado del proyecto común de toda la sociedad. Una sociedad solidaria basada en el apoyo y la cooperación de cada individuo. La aportación de cada uno de nosotros supone una inyección de vitalidad al proyecto».
Es mucho lo que podemos hacer: «Siendo solidarios, no cerrando los ojos ante la realidad y la realidad es que se producen cada año más de 225 millones de casos de paludismo, muriendo más de un millón de personas al año por esta causa, sobre todo en Africa, donde cada 45 segundos muere un niño por esta causa. Podemos ayudar comprometiéndonos a cambiar las estructuras injustas y hacer un mundo mejor. Los enfermos no son números, sino personas. Nosotros somos parte de ese mundo, no volvamos la mirada».
(Más en www.diocesismalaga.es )
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario