Como siempre, agradecer a Dios Trinidad
todo lo sucedido... Por los momentos buenos porque me han hecho ser
muy felices... Y por los momentos malos, porque me han servido para
crecer a pesar del dolor o la tristeza.
Un año, en el que no me puedo olvidar
de esas personas que me han ayudado a ser lo que soy ahora. En
concreto se me vienen dos personas, que me han ayudado en mi
discernimiento vocacional... Que me enseñaron, que Dios se hace
pobre y encarcelado... Y resonaba en mi cabeza el pasaje del
Evangelio cuando está Jesús reunidos con sus discípulos y les
dice: Señor, ¿cuando te vimos con sed, o desnudo, o en la
cárcel...?
Un año, en el que conocí a la mejor
cantante del mundo. Por lo menos, para mí. A vosotr@s os parecerá
una tontería... Pero yo estaba flipando...jajaj
Un año, en el que me mostraron un
movimiento de la Iglesia y que participaba de sus Eucaristías y la
verdad, que gracias a esas personas, disfrutaba...
Un año en el que he ido tomando
decisiones muy importantes en mi vida y que gracias a esas
decisiones, "iba tejiendo mi futuro."
Un año, en el que empezaba un
discernimiento vocacional. Con miedo, con alegría, y sobre todo
FELIZ y estando en "vela" para intentar ver la mano de Dios
en cada acontecimiento... Porque en donde menos esperaba, me daba
Dios un toque...
Un año el que Dios me ha "tirado
abajo todos los esquemas" me ha cogido de la mano, y me ha ido
llevando por sus caminos.
Una ciudad nueva, una familia nueva...
En definitiva, me ha llevado a la Orden...
Al principio con mucho miedo... Pero
como decía otras veces, hoy por hoy, puedo decir que soy el niño
más feliz de mundo.
Agradezco a Dios por todos y cada uno
de los que componen mi comunidad... Una familia. Y que sigo
recalcando, que lo más bonito de las órdenes, es la
FAMILIARIDAD/COMUNIDAD. ¿El mayor tesoro? Los hermanos y la
convivencia.
Y como todo tesoro cuesta, pero no deja
de ser bonito.
Por eso, darle las gracias a Dios por
mi Orden, mi comunidad y cada uno de ellos que la componen. Soy muy
afortunado.
Un año, el que he tenido que dejar mi
Parroquia después de 14 años.
Una Parroquia, que la dejaba entre
lagrimas y pena... Todavía recuerdo la fiesta sorpresa que me hacían
el seis de septiembre en la Iglesia y salones Parroquiales...
Voy a misa, me encuentro a todos los
jóvenes, familia, catecúmenos... Algo raro pasaba allí... Joder,
que si pasaba... Todos muy guapos y guapas, y yo con barba... Y lo
mejor de todo, que era una fiesta para mí... Y que no me había
enterado...
La emoción contenida. Hasta que me
pusieron un vídeo de fotos desde cuando yo era un enano, hasta
ahora...
Aunque también tengo que reconocer,
que empecé a llorar como una magdalena cuando salía un vídeo que
NUNCA me esperaba que pudiesen conseguir... Ahí lo dejo.... Bonito
no, lo siguiente... Vamos, yo ahí era el niño más feliz del mundo
:) y sigo recordando las palabras del vídeo: ¡¡Que disfrute de los
momentos!!
Y eso intento :)
Gracias a todos y cada uno de vosotros,
porque desde la distancia, seguís siendo importante en mi vida.
Aunque tenga ya otra página nueva en mi vida, seguís permaneciendo
en mí.
Un año, el que moría mi Yeya (abuela)
materna, después de un tiempo enferma...
Un año, en el que mis pequeños de
catequesis hacían la comunión (un grupo bastante bueno, y muy
importante) ya que era mi último año en la Parroquia como
catequista...
Ese curso fue increíble... Se hizo por
primera vez la llegada de los reyes magos, un via-crucis, un
vía-lucis, la adoración a la Cruz... Sinceramente, no se si
disfrutaban más ellos o yo... Jajaja.
Ains Señor... Un año, en el que se
han ido (como digo muchas veces) quedando personas importantes en el
camino. Personas que han sido "pilares de la AMISTAD" y que
poco a poco han ido desapareciendo... Dolor, decepción,
desconfianza... Pero lo que me alegra, es que no eran de verdad....
¿Duele? Por supuesto, pero es parte de la vida... A veces el demonio
se viste de amigo o amiga de verdad y te ataca o te hace daño por
ahí... Pero bueno, personas como dije anteriormente, que me alegro
que se hayan ido, porque han dejado paso a nuevas personas y
mejores...
La conciencia la tengo tranquila,
porque a pesar de todo, puedo tener la cabeza bien alta, que la
CONFIANZA (esa palabra tan fácil de decir y que poca gente la pone
en práctica) nunca le he traicionado.
Ya mismo si Dios quiere se me cierra
otra página de mi vida... En horas, será martes 3 y mi
cumpleaños...
Algo diferente por la distancia de mi
familia, amig@s... etc. Pero el mejor regalo que podéis hacer por
mí, es rezar... Para que me haga más fiel a la vocación que estoy
empezando a descubrir y a vivir plenamente.