Reina del cielo, alégrate, aleluya.
Porque el Señor, a quien has llevado en tu vientre, aleluya.
Ha resucitado según su palabra, aleluya.
Ruega al Señor por nosotros, aleluya.
Goza y alégrate Virgen María, aleluya.
Porque en verdad ha resucitado el Señor, aleluya.
Oremos:
Oh Dios, que por la resurrección de Tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, has llenado el mundo de alegría, concédenos, por intercesión de su Madre, la Virgen María, llegar a los gozos eternos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amen.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amen. (tres veces)
Ha resucitado según su palabra, aleluya.
Ruega al Señor por nosotros, aleluya.
Goza y alégrate Virgen María, aleluya.
Porque en verdad ha resucitado el Señor, aleluya.
Oremos:
Oh Dios, que por la resurrección de Tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, has llenado el mundo de alegría, concédenos, por intercesión de su Madre, la Virgen María, llegar a los gozos eternos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amen.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amen. (tres veces)
Me gustaría que nos contaras como fue tu experiencia arriba en las andas. Algunos lo hacen para figurar, a ti se te veía que lo hacías de corazón y con un gran sentimiento de amor cómo Mariano que eres y convencido. Que la Virgen te guarde y te ayude en tu vocación para que pronto te podamos ver de nuevo con el santo hábito que tan bien has hecho a las almas que están internas en la cárcel de Granada y que has sido un gran fraile al servicio de los cautivos dando siempre una palabra de aliento y de esperanza. Se nota que eres un joven con gran vocación y muy arraigada en el fundador que es nuestro Señor Jesús.
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